Batalla por la refinería de PCK: ¡El gobierno federal bajo presión por Rosneft!

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Schwedt/Oder: El futuro de la refinería PCK está en peligro mientras el gobierno federal lucha contra las sanciones estadounidenses.

Schwedt/Oder: Die Zukunft der PCK-Raffinerie steht auf der Kippe, während die Bundesregierung um US-Sanktionen ringt.
Schwedt/Oder: El futuro de la refinería PCK está en peligro mientras el gobierno federal lucha contra las sanciones estadounidenses.

Batalla por la refinería de PCK: ¡El gobierno federal bajo presión por Rosneft!

La refinería de PCK en Schwedt está actualmente en el centro del debate político y económico. El gobierno federal ha recibido seis meses de los EE.UU. para aclarar la complicada estructura de propiedad de Rosneft Deutschland GmbH. Esta medida pretende evitar que la refinería se vea masivamente afectada por las nuevas sanciones estadounidenses contra la industria petrolera rusa. La refinería es propiedad mayoritaria (54 por ciento) de Rosneft y representa una parte crucial del suministro de energía en el noreste de Alemania, incluido Berlín. Sólo el 95 por ciento del combustible utilizado en Alemania Oriental y Berlín proviene de Schwedt, lo que convierte a la refinería en un pilar de importancia estratégica para la región, según informa páginas de pensamiento.

La situación ha empeorado desde que la empresa pasó a manos del Ministerio Federal de Economía en septiembre de 2022. Desde entonces, Rosneft Alemania está bajo gestión fiduciaria, cuyo objetivo es garantizar que la empresa ya no esté controlada desde Rusia y que ningún beneficio fluya hacia Rusia. Esta medida tiene como objetivo garantizar tanto la estabilidad económica como el suministro de energía en Alemania. El presidente del comité de empresa, Dany Ruthenburg, ya ha expresado su preocupación por una posible interrupción de la producción y pide el apoyo del gobierno federal, en particular del canciller Friedrich Merz y de la ministra federal de Economía, Katharina Reiche, según informa el rbb24.

El desafío de las sanciones

A la luz de las nuevas sanciones estadounidenses, los bancos han suspendido las transacciones financieras con la refinería PCK, lo que podría haber provocado un grave déficit financiero. Sin la intervención del gobierno federal, la refinería se habría tenido que declarar en quiebra al cabo de unas semanas. El 28 de octubre de 2025, las autoridades estadounidenses concedieron una exención de seis meses, que inicialmente asegura las operaciones, pero persiste la incertidumbre a medida que cada vez más empresas se retiran para protegerse de posibles sanciones.

Los acontecimientos actuales no carecen de precedentes: con las sanciones británicas contra Rosneft, el entonces Canciller Merz tuvo que ponerse en contacto con el Primer Ministro británico para obtener una excepción. Ahora queda claro una vez más lo importante que es una respuesta rápida y coordinada del gobierno federal para proteger la refinería y sus 2.000 puestos de trabajo.

El futuro de la refinería PCK

En la última conferencia de prensa federal se abordó el tema de la posible compra de acciones por parte del gobierno federal. Sin embargo, la moderadora Angela Wefers restringió el envío de preguntas de los espectadores, lo que generó críticas. El presidente explicó que estas conferencias tienen como objetivo proporcionar información política factual sin presentar planes concretos para resolver el problema.

Por tanto, queda mucho en juego para la refinería de PCK. Las filiales de Rosneft están bajo estricta confianza, y la Agencia Federal de Redes asume los derechos de voto y nombra a un director general para garantizar un funcionamiento fluido y continuo. La gran pregunta que se cierne sobre la refinería es: ¿Qué sucederá a continuación cuando expire el plazo de seis meses y Estados Unidos potencialmente endurezca su política hacia Rusia? El factor decisivo será si se puede mantener el contacto con las autoridades estadounidenses para evitar un inminente estancamiento.