Johanniskäfer en Eberswalde: se abre una nueva guardería con encanto y construcción de madera
Después de dos años de construcción, se inauguró oficialmente la guardería “Johanniskäfer” en Eberswalde. Promueve la educación infantil con innovadoras construcciones en madera.

Johanniskäfer en Eberswalde: se abre una nueva guardería con encanto y construcción de madera
La inauguración de la nueva guardería “Johanniskäfer” en Eberswalde fue una ocasión festiva que atrajo a numerosos invitados de la administración municipal y del distrito, así como de empresas de planificación y construcción. Después de aproximadamente dos años de construcción, ahora estamos deseando que llegue la primera instalación de Johanniter en Alemania, construida principalmente con madera. El alcalde Götz Herrmann y el administrador del distrito Daniel Kurth destacaron el importante papel que desempeñará este centro para la educación infantil en la región. La inauguración oficial tuvo lugar el 15 de julio de 2025, mientras que el uso de las habitaciones para niños comenzará el 1 de agosto de 2025, como informa Barnim Aktuell.
La directora de la guardería, Bianca Behmert, dirige la instalación que ofrece espacio para un total de 85 niños: en la planta baja se pueden atender hasta 30 niños de la guardería, mientras que en la primera planta se pueden alojar 55 niños de edades comprendidas entre 3 y 6 años. Las salas de la guardería están diseñadas según un concepto abierto de enfoque situacional y promueven un entorno en el que los niños reciben apoyo individual. La participación y la implicación de los padres son elementos centrales del trabajo educativo, aspectos que también se enfatizan fuertemente en las guarderías Johanniter de otras regiones, como por ejemplo en Pulheim. Estos centros son conocidos por sus conceptos educativos integrales, que garantizan el apoyo a los niños a través de diferentes diseños de habitaciones y materiales, como destaca el Johanniter-Kita Navigator.
Concepto pedagógico y diseño espacial.
Una característica especial de las nuevas instalaciones es la cocina infantil, en la que los pequeños visitantes pueden hornear y cocinar junto con sus padres: un maravilloso ejemplo de aprendizaje sostenible de la educación lingüística y apoyo integrado en la vida cotidiana. El jardín, que cuenta con más de 650 metros cuadrados para jugar y hacer ejercicio, ofrece más espacio para que los niños se desarrollen individualmente. La calidad del local es crucial para su desarrollo. Los profesionales saben que los espacios orientados a los niños apoyan los procesos educativos de la primera infancia y promueven el aprendizaje independiente, como explica el Blog de Pedagogía.
Aquí no sólo juegan un papel importante los colores y la luz, sino que la flexibilidad de los muebles y la accesibilidad de los materiales también son factores importantes para el bienestar de los niños. La instalación está diseñada para satisfacer diferentes necesidades, ya sea de descanso o ejercicio. El objetivo es crear numerosas áreas de experiencia para los niños e involucrarlos activamente en los cambiantes procesos de aprendizaje. La sala actúa como un “tercer educador”, por así decirlo, y está estrechamente controlada por los especialistas para identificar y responder mejor a las necesidades de los niños.
Las actividades intergeneracionales planificadas con el vecino barrio Johanniter también prometen encuentros emocionantes y promueven la cooperación entre generaciones. Los padres y los niños pueden esperar no sólo encontrar valiosos recursos educativos, sino también una comunidad vibrante. El edificio "St. John's Beetle" no es sólo un nuevo lugar para la educación, sino también un elemento más en la comprometida ciudad de Eberswalde.