Guerra del agua en Zeuthen: ¡Los peligrosos PFAS contaminan nuestra agua potable!
En Zeuthen se detectaron PFAS en el agua potable, lo que supone un riesgo para la salud. Los nuevos límites entrarán en vigor en 2026 y 2028.

Guerra del agua en Zeuthen: ¡Los peligrosos PFAS contaminan nuestra agua potable!
En un hecho alarmante, la Federación para el Medio Ambiente y la Conservación de la Naturaleza (BUND) ha descubierto contaminación con PFAS en el agua potable de Zeuthen. Estas sustancias químicas, a menudo denominadas “sustancias químicas eternas” porque tienen una vida extremadamente larga, recientemente han superado los límites que podrían plantear un problema de salud. Las muestras se tomaron de junio a octubre de 2023 y muestran que el número de lugares afectados en Berlín y Brandeburgo es alarmantemente alto: en total, 42 de 46 muestras de agua potable en todo el país están contaminadas [maz-online.de].
¿Qué son las PFAS? Estos productos químicos sintéticos se han utilizado en una variedad de productos desde la década de 1950, incluidas sartenes antiadherentes, textiles para exteriores e incluso productos que a veces se consideran ecológicos, como ciertas alfombras. La estructura química de las PFAS, que consta de átomos de carbono y flúor unidos, las hace prácticamente resistentes a la degradación en el medio ambiente y peligrosas para la salud humana. En particular, en Zeuthen la concentración supera los límites establecidos legalmente.
Riesgos para la salud
Los efectos sobre la salud asociados con la exposición a las PFAS son complejos. Los estudios muestran un mayor riesgo de diversas enfermedades, incluido el colesterol alto, enfermedades cardiovasculares y daño hepático. Los Institutos Nacionales de Salud de EE.UU. (NIEHS) informan de una presencia generalizada de estas sustancias en la sangre, con posibles consecuencias como retraso de la pubertad, reducción de la densidad ósea en los adolescentes e incluso un mayor riesgo de diabetes tipo 2 en las mujeres. Casi el 97% de los estadounidenses analizados tienen residuos de estas sustancias químicas, lo que subraya la urgencia de tomar medidas contra estas sustancias no sólo en Brandeburgo sino a nivel internacional, menciona también niehs.nih.gov.
Este problema no sólo afecta a nuestra agua potable, sino también a los alimentos. Las PFAS pueden ingresar a la cadena alimentaria a través de procesos industriales y eliminación inadecuada. Los pescados, las frutas y los huevos parecen verse especialmente afectados. La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ya ha fijado valores para la ingesta semanal tolerable, que pretenden servir como salvaguardia contra los riesgos existentes.
Medidas regulatorias y desafíos
No se deben subestimar los próximos cambios en la legislación. Está previsto que a partir de enero de 2026 entren en vigor nuevos límites legales para las PFAS en el agua potable. Estos nuevos requisitos representan importantes desafíos técnicos y económicos para las empresas de agua de Brandeburgo. Los procesos actuales para eliminar las sustancias químicas suelen ser costosos y requieren muchos recursos. Queda por ver cómo reaccionarán las empresas ante esto.
Las normas de la UE intentan controlar el problema. Muchos PFAS ya están sujetos a restricciones, y el uso de PFOS y PFOA ha estado fuertemente regulado durante años. Una estrategia química revisada tiene como objetivo hacer retroceder a todos, excepto a aquellos que tienen usos esenciales. Las normas sobre el uso de estas sustancias se cumplirán aún más estrictamente en el futuro, como también se documenta en echa.europa.eu.
En general, la región enfrenta un desafío que no debe subestimarse al abordar el problema. La situación actual deja claro que ya es hora de desarrollar e implementar soluciones seguras para el agua potable y los problemas de salud relacionados.